"Pero si esa canción es la más triste del mundo ¿Cómo la van a volver Salsa?” Me dijo hace unos años una francesa cuando le conté que Yuri Buenaventura, un músico colombiano que probando suerte en Francia, se había dado a conocer en el mundo con su versión de “Ne me quitte pas”, balada original de Jaques Brel. Recuerdo que me quedé pensando qué para los que hemos crecido bajo la influencia de este ritmo musical no nos resulta extraño que las letras más tristes, nostálgicas o melancólicas se vean acompañados por la clave, los metales y las percusiones que le dan el carácter festivo y alegre que pareciera prevalecer en lo que llamamos Salsa, y es que desde el principio de su historia este genero se ha nutrido de todos los ritmos y letras de los que ha podido echar mano para ir creando su sonido e historias